Celebraciones patrias en el exterior, mexicanos en Alemania 

El mes patrio es para los mexicanos el mes de fiesta, de color, de emociones, de euforia por ser y pertenecer a un pueblo de gente alegre y luchona. Septiembre es para muchos nacidos en la República mexicana un pretexto para reconocerse mexicano, para apropiarse de la música y el folklore, para degustar las delicias culinarias de la vastísima oferta gastronómica en las diversas regiones del país. La noche del 15 de septiembre es el motivo nacional que abarrota las plazas y centros de cada pueblo y ciudad donde miles de almas vitorean a los héroes que nos dieron patria y aprovechan para disfrutar de la fiesta más mexicana del año.

En el exterior, las comunidades mexicanas también celebran y festejan la independencia de México. Países como Alemania donde la diáspora mexicana es nutrida, registra una comunidad organizada. Según las cifras de la Oficina Federal de Estadísticas de Alemania en 2018, eran 17,070 mexicanos radicados en los distintos estados federados del territorio germano; de los cuales 15 mil oscilan entre 18 y los 65 años de edad;  de ese total 7,500 son mexicanos profesionalmente activos. Por lo que destaca la alta cualificación profesional de una comunidad de mexicanos integrados a la cultura germana. Muchos de ellos vinieron a fortalecer su formación académica a este país y después encontraron  oportunidades laborales o personales para radicar aquí.

 

El año 2020 se posiciona como un año muy difícil en la historia de la humanidad. Nos azota una pandemia (Covid19), que nos causa dolores profundos, nos arranca miles y miles de vidas, fragmenta y separa a familias y amigos, trunca y destruye planes y nos obliga a implementar  cambios vertiginosos en nuestras maneras de vivir y convivir con los demás.

Septiembre será para muchos de los mexicanos que vivimos en el exterior un mes de nostalgia, de añoranzas y de reflexión, tras esa terrible distancia geográfica acentuada en estos tiempos. En Alemania, los mexicanos organizados en agrupaciones o círculos de amistad suelen organizar festejos donde se hace uso de los recuerdos de la celebración de independencia nacional y se echa mano de las posibilidades y las condiciones que existen en la ciudad o lugar de residencia.

 

Dada la cantidad de mexicanos en el país, se han formado agrupaciones que hacen gala al folclor y la cultura mexicana, la globalización ha permitido acercar productos  auténticos de la cultura azteca, ya es posible comprar ingredientes de la cocina por lo que en muchos rincones de Alemania existen esfuerzos gastronómicos de restaurantes que ofrecen comida típica, auténtica y de calidad. Sin soslayar la presencia de las representaciones del gobierno mexicano en el país (la Embajada mexicana ubicada en el corazón de Berlín y sus varios consulados) acostumbran cada año organizar sendas recepciones para celebrar en grande la independencia del país, muchas de las veces compartiendo la mejor cara de México, entre discursos diplomáticos, con una muestra de la música de buen mariachi, acompañados de danzas y  bellas voces ejecutados por personajes mexicanos residentes en Alemania, ofreciendo una muestra de los antojitos para «convivir» con las autoridades del gobierno federal y local, el cuerpo diplomático representando al mundo y una minoría de la comunidad mexicana con la intención de estrechar y dar cuenta de las estrechas relaciones entre México y Alemania.

Este año, entre la  pandemia, las nuevas disposiciones de convivencia y el rebrote de contagios, seguramente las festividades patrias quedarán para la memoria y la espera que el 2021 sea benevolente y generoso. Los migrantes mexicanos, muchos guardamos en el corazón ese dejo de pertenencia que siempre se agudiza y hace presente en el mes patrio. Vivir en el exterior te regala grandes oportunidades de crecer, de aprender pero también te coloca en retos y dificultades. Al final la reflexión queda.. gritarle al mundo Viva México en el 2020 mostrando la mejor parte de nosotros mismos, siendo empáticos, propositivos, respetuosos para contribuir a que la «nueva realidad» en la que estamos sometidos sea más llevadera y volvamos a pensar en las grandes celebraciones de gente eufórica, feliz, arremolinada en las plazas y jubilosa de ser y sentirse mexicano.

Facebook Alejandra Balleza Sachse

Twitter @AleBa_Sa