El puerto más eficiente del pacífico mexicano

 Por: Aarón Andrade

En nuestro país, la actividad portuaria se remonta a la conquista. Aunque la historia señala que los Aztecas ya hacían uso de pequeñas embarcaciones para el transporte de personas y mercancías, fue a la llegada de los españoles donde trascendió de manera importante la actividad marítima, trayendo consigo nuevas técnicas y desarrollo.

Es en la época colonial cuando se fundaron los primeros puertos de nuestra nación, entre ellos Veracruz y Campeche en el Golfo y años después Acapulco en Guerrero, San Blas en Nayarit y Salina Cruz en Oaxaca como parte del Pacífico mexicano.

En 1970 se crea la Comisión Nacional Coordinadora de Puertos, integrada por el Gobierno Federal, trabajadores portuarios y usuarios. Con ello se garantizan mejores condiciones de trabajo y una estructura adecuada para la seguridad y protección de las cargas. En Colima se da inicio en 1971, con la creación de la empresa de Servicios Portuarios de Manzanillo (Seporman).

En 1989 se crea Puertos Mexicanos como un órgano capaz de contar con los recursos generados, recaudando los derechos por el uso de la infraestructura portuaria.

La Administración Portuaria Integral de Manzanillo S.A. de C.V. es entonces una entidad del Gobierno Federal que inició sus operaciones en febrero del año de 1994, con el fin de administrar, promocionar, construir, desarrollar y mantener la infraestructura del recinto portuario de Manzanillo, Colima.

En la actualidad la API de Manzanillo ha conseguido privatizar los servicios que se prestan dentro del recinto portuario, lo que se traduce como un beneficio para todos al fomentar competencia sana en tarifas y costos. Además se continúa trabajando con la atracción de inversión pública y privada, participando diversas empresas que priorizan una integración logística. Entre ellas están las navieras, las terminales, portuarios, transportistas y muchas

más que colaboran en el mantenimiento y aumentan las dimensiones del puerto. 

Héctor Uriostegui Moreno, director de Grupo JACO, importante centro logístico en Manzanillo argumentó. «En territorio, el puerto de Manzanillo es muy pequeño en comparación a todos los puertos  que existen en México, pero es el puerto más eficiente de todos en el país, gracias a una comunidad portuaria que trabaja intensamente. Afuera del puerto existen más de 300 empresas entre transportistas y centros logísticos que le dan flujo a toda la mercancía que nos llega a Manzanillo. Todas las empresas fuera del puerto ofrecen los servicios que los exportadores e importadores necesitan para realizar sus operaciones comerciales».

Para el desalojo de las mercancías que se mueven por el Puerto, Manzanillo cuenta con 6.20 kilómetros de vialidades internas y 24.70 kilómetros de vías férreas, lo que le permite el desalojo adecuado y seguro de la carga. Esto de acuerdo a la página oficial de API Manzanillo.

A su vez dispone de 14 empresas operadoras que corresponden a inversiones de capital privado, nacional y extranjero para el manejo de mercancías, brindando rendimientos de clase mundial, con una posición privilegiada para competir favorablemente con otros puertos ubicados en el Pacífico.

Todos son importantes, aseguró el ex director de API, Capitán Héctor Mora Gómez. «Un engranaje perfecto en la maquinaria  que debe funcionar todos los días, este puerto crece por la necesidad del mercado y el usuario prefiere a Manzanillo porque más allá de ser un puerto pequeño es un puerto  funcional».

Se prefiere al puerto de Manzanillo por diferentes razones entre ellas las más importantes son la  seguridad y la conectividad comentó Oscar Urdiales Castillo, director de OPINCO. Tenemos una inercia de crecimiento sobretodo porque en un análisis macro económico mundial China y la India se están posicionando fuertemente y la puerta de acceso al mercado del mundo para ellos es el puerto de Manzanillo.

En definitiva el puerto de Manzanillo cuenta con una gran capacidad, eficiencia y calidad, factores que facilitan el comercio marítimo internacional en la Cuenca, lo que le convierte en el puerto latinoamericano líder, con infraestructura y operaciones de gran escala, que desde México enlaza la productiva cadena logística entre los continentes.