DR. CÉSAR CÓRDOBA E.

En la actualidad después del cáncer de piel, el cáncer de mama es el cáncer que se diagnostica más comúnmente en las mujeres en los Estados Unidos. El cáncer de mama puede ocurrir tanto en los hombres como en las mujeres, pero es mucho más frecuente en las mujeres (relación 100 a 1). Las campañas para crear conciencia y la investigación, han permitido avanzar en el diagnóstico y tratamiento de este cáncer.

Los índices de supervivencia para el cáncer de mama han aumentado y el número de muertes continúa reduciéndose, en su mayor parte a causa de factores como una detección más temprana, personalización de los tratamientos y una mejor comprensión de la enfermedad. Los factores de riesgo son aquellos que incrementan la probabilidad de que usted presente cáncer de mama: Usted puede controlar algunos factores de riesgo, como beber alcohol, consumo de tabaco, peso corporal, actividad física. Otros, como los antecedentes familiares, son factores no controlables.

Cuantos más factores de riesgo tenga, más aumentará el riesgo. Sin embargo, no quiere decir que usted tendrá cáncer. Muchas mujeres que presentan cáncer de mama no tienen ningún factor de riesgo ni antecedentes familiares. Algunas mujeres tienen mayor riesgo (se calcula que del 5 al 10 % del cáncer de mama es hereditario) debido a ciertos marcadores genéticos. Los genes conocidos como BRCA1 o BRCA2 son los responsables de la mayoría de casos de cánceres de mama.

Actualmente hay maneras de saber si se cuenta con esta alteración de manera sencilla antes de presentar cualquier síntoma. Los implantes mamarios, el uso de antitranspirantes, y el uso de sostenes de varillas no incrementan el riesgo de cáncer de mama. Tampoco hay evidencia que compruebe un vínculo directo entre el cáncer de mama y los pesticidas. Hacer cambios en tu vida diaria puede ayudarte a reducir tu riesgo de cáncer de mama. Intenta lo siguiente:

Familiarízate con tus pechos durante un autoexamen. Familiarizarse con sus mamas, inspeccionando una vez al mes los primeros días posteriores a su regla, o en caso de ya no presentar regla, escoger un día fijo al mes, para explorar sus pechos durante un autoexamen y tomar conciencia sobre sus mamas. Si hay un cambio que es nuevo, hay bultos u otros signos inusuales en tus mamas, habla en seguida con tu oncólogo.

Consulta a tu oncólogo sobre los análisis para detección oportuna del cáncer de mama. Habla con tu oncólogo sobre cuándo comenzar las pruebas y exámenes de detección como son exámenes clínicos de las mamas y mastografías. Juntos podrán decidir qué estrategias para detección del cáncer de mama son mejores para ti.

• Si bebes alcohol, hazlo con moderación. Limita la cantidad de alcohol que consumes por día, si es que decides beber.
• Haz ejercicio la mayoría de los días de la semana. Ten como meta hacer 30 minutos de ejercicios casi todos los días de la semana.
• Limita la terapia con hormonas posmenopausia. La terapia hormonal combinada puede aumentar el riesgo de cáncer de mama. Habla con el médico acerca de los riesgos y beneficios de la terapia hormonal. Para reducir el riesgo de cáncer de mama, usa la menor dosis posible de terapia hormonal durante el período más corto posible.
• Mantén un peso saludable. Si tu peso es saludable, procura mantenerlo. Reduce la cantidad de calorías que consumes a diario y aumenta lentamente la cantidad de actividad física.
• Opta por una dieta saludable. Una dieta mediterránea complementada con aceite de oliva extra virgen y frutos secos mixtos quizás tengan un riesgo reducido para cáncer de mama. Esta dieta está enfocada en alimentos basados en plantas, como frutas y verduras, cereales integrales, legumbres, y frutos secos. Las personas que siguen la dieta mediterránea eligen grasas saludables, como el aceite de oliva en lugar de mantequilla, y pescado en lugar de carnes rojas.