De hacienda azucarera a referente artístico

 

Ubicada a 2 kilómetros del pueblo mágico de Comala, en Colima, se encuentra una de las haciendas más importantes de la región. Aunque se puede llegar en coche tranquilamente, un paseo a pie no suena nada mal ya que la naturaleza del recorrido hace más ameno el camino que se torna refrescante y gratificante por el cántico de los pájaros. Una vez que llegamos a la localidad de Nogueras podemos sentarnos y disfrutar de la maravillosa ex Hacienda de Nogueras. 

 Su arquitectura inigualable con calles empedradas y fachada comalteca tradicional nos dan apenas una probadita de lo que pudo haber ocurrido en este maravilloso lugar. Pareciera que el tiempo no pasa pues las edificaciones continúan con una pintura brillante y una limpieza en el acero que pocos lugares tienen.

Volteando al pasado

Benjamín Cruz Acencio, Cronista Municipal de Comala, nos comenta que la creación de la ex hacienda se remonta al año de 1704 cuando el español Juan de Noguera llegó a estas tierras y fundó el rancho de Ajutitlán. Años después , en 1813, la propiedad fue adquirida por Tomás Quiroz, lo que después se le conoce como “Hacienda de Quiroz”; esto, retomado de los apuntes históricos  de José Oscar Guedea Castañeda.

Fue hasta el año de 1898 cuando se termina de construir la capilla dedicada a la virgen del Refugio que aún continúa en la actualidad y que a día de hoy todavía se utiliza para ceremonias religiosas.

Para entonces el nombre de la hacienda fue cambiado a “Hacienda de Nogueras”.

En este mismo año la sociedad Vergara Rangel adquiere una fracción de la hacienda e inicia la producción de caña de azúcar y de alcohol. Durante estos años el lugar se convirtió en una de las empresas azucareras más importantes de la región. Aún ahora se puede imaginar al lugar como uno de los espacios más importantes de la propiedad por los restos de las chimeneas que aún permanecen.

Por su parte, J.Jesús Valencia, anterior cronista de Comala, señala que en 1930 la producción azucarera cambia dándole inicio a la plantación de limón, producción tan importante para la región que se llegaba a exportar hasta Texas, Estados Unidos. El cronista menciona que incluso se llegaban a utilizar cada semana hasta cuatro vagones de ferrocarril para poder transportar la mercancía.

Tal importancia tuvo dicha hacienda que existen datos que subrayan que la bodega se encontraba en la actual ubicación del Palacio Federal en la capital colimense y que la hacienda llegaba a colindar con la Hacienda de San Antonio, sin embargo se vio reducida por la creación de ejidos como el de Suchitlán, Comala y Nogueras por orden federal.

Fue en 1940 cuando la hacienda comenzó a cerrar sus actividades y quedó disminuída a lo que es ahora su casco. Por su parte, la sociedad Vergara- Rangel adquirió nuevamente parte del lugar dando pie a una época artística sin igual.

Nuevo rumbo para la hacienda

Desde entonces los Rangel han vivido en este espacio donde nació uno de los artistas con mayor renombre de forma nacional e internacional: Alejandro Rangel Hidalgo. Dedicado a la pintura, su peculiar estilo se conformó en gran parte a su multifacética labor como pintor, coleccionista, diseñador, ilustrador gráfico y escenógrafo, además de diseñar muebles y herrería.

El arte que de él surgía llevó al “estilo rangeliano” a lugares dentro y fuera del país poniendo en el mapa a Comala. Tal es así que el escritor Juan Rulfo decidió retomar a Comala en su primera novela, Pedro Páramo, siendo catapultada a la escena mundial y de la cual se hizo un filme que ganó innumerables galardones al igual que la obra literaria.

La amabilidad de la gente, las artesanías de la región, su gastronomía y su arquitectura blanquecina con techos rojos y calles empedradas, llamaron la atención del escritor de quien, los vecinos aseguran, se pasaba horas sentado en el jardín principal observando la parroquia donde su tío fungía como clérigo y a quien visitaba innumerables veces, tal es así que ahora podemos encontrar una estatua del escritor en el mismo lugar donde se sentaba habitualmente.

Como Juan Rulfo, muchos fueron los artistas que han visitado Comala y Nogueras, tal es el caso de Armando Manzanero, Griselda Álvarez, Rigoberta Menchú, Juan José Arreola, entre otros, quienes se quedaron admirados por la belleza del lugar.

Actualmente la ex-Hacienda de Nogueras es un destino turístico clave dentro de Colima pues cuenta con un legado histórico donde se pueden visitar el Museo Universitario Alejandro Rangel Hidalgo así como la ex hacienda y el jardín botánico. Todo visitante puede estar seguro de que recibirá un buen trato y atención.