DR. JOSÉ ANTONIO CÓRDOBA E.

El cáncer de mama es la primera causa de muerte por cáncer en la mujer en México, siendo prioritario su diagnóstico. La radiología desempeña un papel fundamental en el diagnóstico temprano de esta enfermedad.

Las técnicas radiológicas son la piedra angular en el diagnóstico temprano del cáncer de mama debido a que, en etapas tempranas, la enfermedad no produce síntomas ni lesiones palpables durante la autoexploración.

La mastografía es el estudio de cribado que se utiliza para la detección oportuna del cáncer de mama en mujeres a partir de los 40 años y se debe realizar de manera anual. Permite visualizar calcificaciones minúsculas que se presentan como dato inicial en un 70 % de los casos de cáncer de mama.

El ultrasonido es un complemento en el diagnóstico y ayuda a valorar el tejido mamario denso, así como a esclarecer el carácter de las anomalías encontradas en la mastografía, como la naturaleza sólida o quística de una lesión, lesiones intraductales y la extensión hacia los ganglios axilares. Este es el método de imagen inicial de elección en pacientes menores de 40 años.

Con ambos métodos de imagen es posible realizar procedimientos mínimamente invasivos con ayuda de una aguja especial, se realiza un punción dirigida y se extrae una muestra de tejido, para analizar la presencia de células malignas y confirmar el diagnóstico de cáncer de mama.